Del valor de la amistad...

Normal- mente me quejo del egoísmo del mundo. De lo injustos que somos por el solo hecho de pensar en nosotros mismos. Sin embargo, me permitiréis que hoy, ejerciendo mi derecho a una pataleta, me queje de lo injusto que es que a alguien le roben su ego, que le priven del síndrome “Loreal”, y utilicen a la persona para aliviar sus cargas sin pensar en el otro.

Siempre he defendido las libertades individuales hasta el borde en el que se rozan con las libertades del resto de individuos. Y esto es un claro ejemplo de lo que no debemos hacer, coartando la necesidad de vivir y disfrutar de los otros. Todos tenemos un límite que no debemos superar o que los demás deben respetar. Tu línea ha sido masillada, borrada y no debes permitirlo.

Hay que preocuparse por la satisfacción personal, alimentar un poco nuestro ego, y plantar barreras, que no nos aíslen, sino que protejan la parte vulnerable de la persona. Esto no quiere decir que no debemos ocultar nuestros sentimientos por miedo a mostrarnos como somos, mas bien hablo de vivir nuestra vida antes que cargarnos con pesos que no podemos asumir.

Aprender a decir “No”, valorar un “Si” y descubrir que no solo los demás pueden desviar sus cargas hacia nosotros. Todos necesitamos una tabla sobre la que agarrarnos para flotar, a la que subirnos de vez en cuando. No supone debilidad, es solo una ayuda.

Ante todo y todos, y por encima de cualquier otra cosa, quiero que valores lo que te planteo. Hoy te ofrezco al igual que ayer y que el resto de los días, pasados y venideros, mi persona y todo lo que te pueda hacer falta. Mi amistad de forma incondicional, independientemente del resto del mundo y de lo que suceda con el. No te mereces ciertas cosas, no es justo.

Pero… los pero son lo importante, no todo es malo… Y después de esta charla, ante el amanecer de un nuevo día, disfruto de cada cosa que comparto. Del valor y la fuerza de la palabra, de lo inusual de una situación y de la satisfacción que me produce. Hoy te deseo un buen día, hoy os deseo un buen día… y que al menos descubráis esa estrella sobre el hombro izquierdo… Esta “Otra Parte” que os complete, y que parece ser que todos tenemos esperándonos en algún lugar del mundo….

Sonando: Agua
Estado: empático

“Nuestra alma se transforma en dos, estas nuevas almas se transforman en otras dos, y así en algunas generaciones, estamos esparcidos por buena parte de la tierra…

…En la vida tenemos una misteriosa obligación de reencontrar, por lo menos, una de esas Otras Partes. El amor mayor que las separó, se pone contento con el amor que las vuelve a unir…” Fragmentos de Brida