Días de borrasca...

Víspera de resplandores… Hoy he salido a la calle, en lugar de bajar al garaje directamente he parado en el portal, he dejado el portátil sujetando la puerta y he decidido darme un remojón ante la atónita mirada de vecinos y portero… Caía agua del cielo como si el mundo se fuera a acabar.

Que sensación más placentera, el pelo empapado, resbalando por la cara, y recordando momentos pasados, en otro lugar, en donde me mojaba todos los días (o casi todos..).

Después de esto, y en lugar de subir a cambiarme, no fue para tanto, he cogido el portátil, he saludado al portero y me he bajado a por el coche. 20 minutitos escasos hasta la oficina y sin sitio delante de la puerta… pero y que más da… jajajaja esta lloviendo y hay q aprovechar…

Encuentro un sitio y veo, al lado, un barrendero con su chubasquero resguardado en un portal, mirando como la gente pasa apretando el paso, sin inmutarse, si llueve no hace falta barrer, para no mojarse en exceso, ya se sabe que el paraguas solo tapa lo que cae de arriba ;) Así que toda la gente va con prisa y yo, abro la puerta, me pongo la cazadora con calma y saco el portátil… El hombre me mira y no se lo cree… Mientras tanto dirijo mis pasos, hacia la puerta de la oficina 300 metros mas lejos, riéndome, disfrutando de la sensación antes descrita y viendo como gente malhumorada no hace más que desperdiciar lo que es un momento único.

Hoy es un gran día…